Este año, a pesar del Corona Virus, he tenido mucha suerte y he podido hacer un par de immersiones con nuestro estudiante favorito ;D.
Aquí tenemos al estudiante, David, aprendiendo a poner comida en el horno, hervir, preparar los platos, servir la comida, colar, fregar, poner la mesa, cubertería y cocinar en inglés. Así como aprender a cocinar salmón al horno y enseñarle a hacer mi propia versión del gazpacho andaluz, etc.
Obviamente él sabe que cuando está con nosotros va a practicar inglés las 24 horas del día así que él donde se hagan estas inmersiones le da realmente igual, pues la idea es hablar, practicar y mejorar su inglés hablado y habilidades de listening en inglés en las horas que estemos despiertos. Así luego acaba dirigiéndose directamente en inglés a administradores de lotería o miembros de la hostelería sin darse cuenta (hasta que le miran raro y le vuelven a preguntar que qué les ha dicho. Así hasta que llega a la conclusión de que es que les estaba hablando en inglés y por eso no le entendían.
Como la inmersión de agosto nos tocaba en plena ola de calor… y como mi modelo de negocio es flexible y adaptado al 100% a las necesidades de mis clientes pues cuando me sugirió pasar un par de días fuera del piso acepté encantada. Estuvimos pensando en qué otro sitio podríamos hacerla y me vino Marbella a la cabeza por ser una zona muy frecuentada por ingleses y donde deduzco que mucho servicio al cliente está acostumbrado a que les hablen en inglés, para así también hablar en inglés con los camareros y en las tiendas. Como a él le encanta escoger alojamiento por ciertos criterios concretos como vistas o puntuaciones altas … pues le dejé a él buscar y encargarse de la reserva de hotel/apartamento para que disfrute de la experiencia a su gusto.
Y wow… ¡¡¡mirad que vistas!!!
Me encantó la urbanización privada con su piscina al lado de la playa y su ventanales gigantes en el salón ;D. Abajo conectando el ordenador a la tele para ver una pelí, obviamente, en inglés y sin subtítulos (nivel pro). 😀
Como le encantan mis fotos y hacer fotos pues también aprovechamos para echar una sesioncilla mañanera de fotos uno de los días. No sé en qué momento se me ocurrió que recién «levantá» con pijama y sin maquillaje era buena idea. Pero bueno, hay que promover el estilo natural, sin peinar ni ná. XP
Aquí practicando para cuando me toque la lotería y tenga un sofá y unos ventanales así de grandes para mí sola y sin trabajar (aunque trabajar así da gusto, es como si no fuese trabajo) ;D.
Cada vez que salimos a comer o cenar fuera es una nueva oportunidad para hablar de comida, tamaño de los platos, sabores, bebidas, menús, entrantes, platos principales, la cuenta, etc.
Esa taza estaba en la casa pero resume nuestra filosofía de vida muy bien.
Y de paso también aproveché el segundo día para llevarme la cámara a la piscina. Aquí abajo los profesores de inglés «sufriendo» en la piscina. ;D
En la piscina practicamos también todo tipo de vocabulario desde nadar, manguitos, salvavidas, agua salada, cloro, nadar rápido, ahogarse, borde de la piscina, toalla, abrir sombrilla, estar en la sombra, ponerse crema, ducharse, secarse, etc.
Y a ellos les encanta nuestro alumno porque siempre se lo pasan muy bien con él. Y claro, con experiencias así y las del año pasado ¿quién no? Además su único trabajo es ser ellos mismos y hablar siempre en inglés y asegurarse de que no se habla nada en español. ;D
En la segunda íbamos a ir al Aquaola pero se me ocurrió que un hotel con toboganes sería mucho más fácil con los pequeños. Y fue el mismo proceso también. Otro sitio increíble esta vez en Roquetas de Mar. Esta vez pasé de hacer así fotos en condiciones así que ahí abajo están están las que hice con el móvil.
Viajando es buena oportunidad para aprender vocabulario, desde coger el ascensor, mencionar que tiene vistas, la forma de la piscina, los toboganes, las mascarillas, el Covid, hacer cola para tirarse desde los toboganes, la piscina más o menos profunda aquí o allá, etc.
La arquitectura original del hotel, las cristaleras, las zonas comunes, el buffet, la recepcionista, la pulsera del hotel, etc.
Yendo al centro comercial y haciendo foto cutre al coche por si luego no me acuerdo de donde aparqué el coche (o llego al garaje por otra salida y me desoriento).
Y bueno, y que no se olvide la diversión y el inglés que aprendemos mientras vamos en el coche, desde hacer apuestas para ver cuantos coches de cierto color vemos hasta gritar el nombre de los fenómenos geográficos o de carretera más repetidos como puentes y tuneles durante todo lo que dure dicho puente o túnel. Estoy segura de que es un buen ejercicio de pulmones. Lo mejor es cuando intentamos cantar la canción que los peques escogieron para nuestro alumno en este viaje. Creo que la habremos escuchado (e intentado cantar) unas 20 veces en la actividad de listening en el piso más unas otras 60 veces en el coche. XD
Y ahora es cuando de verdad puedo decir que me encanta mi vida y mi trabajo. Pues escojo siempre trabajar en cosas que me gustan, dar clase no tiene porque ser una experiencia tediosa. Aprender puede ser mucho más divertido experimentando el contexto natural de las cosas y sobre todo teniendo mucha oportunidad de argumentar y hablar en inglés que es lo que menos se puede hacer en academias y clases particulares de inglés normales y corrientes.
Cuando trabajar es como ir de vacaciones y en excelente compañía… yo encantadísima de la vida de tener alumnos y clientes así que ya conozco de antemano (no confío fácilmente en la gente y esto de las inmersiones las reservo para clientes con los que ya he dado clases anteriormente) y demuestren interés genuino por aprender de una forma variada y amena ;D
Another unforgettable experience and moments, all in english of course 😀
Ohhh thank you so much!! ;D